domingo, 1 de noviembre de 2009

Viaje nº1 Sofia y Estambul (Parte II)

Mañana para mí es una palabra relativa... es broma, no he tenido mucho tiempo. Bueno, continúo.

Llegando a la estación de Sofía, conocimos a una pareja de españoles que viajaban con su bebe y la verdad, a mí personalmente, me pareció una idea muy buena. Visitar Europa en tren. No solo lo hace gente joven, interraileros o gente de erasmus. Estuvimos hablando bastante rato tanto en el andén como en el tren. Trabajaban en Londres y se iban recorriendo Europa en tren. Nos recomendaron Belgrado, que curiosamente será nuestro próximo destino.

Para el tren de Sofía – Estambul, que fueron 13 horas, pillamos unas provisiones de 2L de Vodka y unas botellas de refresco de limón y sprite... y claro todos sabemos qué pasa si en menos de 2 metros cuadrados se unen cerca de 10 personas y alcohol, pues se lía! Ocurrió un incidente: rompí una goma de uno de los cristales de la puerta que une los vagones y cayó, pero gracias a la tecnología soviética, el cristal continuo intacto. Simplemente la goma cedió, pero no tuvo consecuencias... Conocimos a una pareja con la cual estuvimos hablando casi todo el trayecto. Otra de las anécdotas fue en la frontera, a eso de las 4 de la mañana. Nos bajan para pagar el visado y sellarnos el pasaporte y por ser españoles "solo" nos vale 15€. Como había unas chicas de USA nos pusimos a cantar la canción de Bruce Springteen "Born in the USA" y la verdad es que sonó hasta bien. No sé si sería el alcohol que llevaba encima, pero nos lo pasamos de pm.

Llegamos a Estambul a eso de las 7-8 de la mañana y, de camino al hostal, la ciudad nos enseño lo que era. Una urbe de más o menos 15 millones de habitantes, que mires donde mires, hay una foto que podría ser perfectamente postal que venden en los puestos. Impresionante. Mezquitas, Castillos, Torres, Bósforo... por contra tenemos que es una ciudad muy turística, por lo que, con los precios hay que andar con ojo. El hostal muy bien la verdad. Por 7€ cama y desayuno, ¿qué más quiero?
Estaba en el centro de Estambul, cerca de la Mezquita Azul y de Santa Sofía. Las vimos de pasada, ya entraríamos al día siguiente. Y nos fuimos andando hasta la Torre Galatta, que fue usada como faro y muchas otras cosas, y con razón… con esas vistas del rio y el Bósforo y de la ciudad en general. Impresionante. Después de esto fuimos a la Plaza de Taksim, una zona de comercios y teterías con narguiles (estilo Calle Larios para los Malagueños). Estuvo entretenido. Una cosa que me llamó la atención fueron los puestos de zumos de naranja, granada y pomelo. Después de un día con resaca y habiendo más o menos aprovechado el día, un descanso era obligado.

El lunes fue mucho más fácil para hacer todo, ya que no había tanto turista. Entramos en la Mezquita Azul (pondré una foto de la vista al entrar porque merece la pena) y por dentro es bonita pero me esperaba más. También visitamos las Cisternas deYerebatan , obra bizantina según pude leer en los carteles informativos. Ahí se almacenaba el agua que era traída desde los bosques y manantiales de Belgrado y era usada para almacenar agua cuando los asedios, por si los enemigos envenenaban el agua o destruían los acueductos. Pero lo más inquietante no es lo grande que es si no que hay unas cabezas de Medusa, en la base de 2 de los pilares que lo componen y nadie se explica cómo han llegado hasta ahí esas cabezas ¡y yo menos!
Seguimos la visita y pasamos esta vez por el Palacio de Topkapi. Vistas impresionantes del Bósforo, mucha exaltación de las joyas, de las construcciones. Pero todo hay que decirlo… un poco caro la entrada pero bueno, solo se viaja una vez y hay que ver lo máximo posible. Luego nos perdimos un poco por Estambul en busca de una Mezquita y nos tiramos toda la tarde andando para que al llegar, cerrara y nos quedamos sin verla... Esa noche jugaba el Barcelona contra el Zaragoza, y fue casi una misión imposible verlo. Lo di por perdido y me fui al cuarto junto con los otros. Nuestra intención era dormir pero claro, cuando a Sandra se le mete en la cabeza una cosa... pues acabamos todos jugando a las películas... si es que ¡no tenemos remedio!

Tras el desayuno de rigor con mermelada de rosas (no la probé pero me contaron esta gente que no estaba muy buena) continuamos nuestro periplo por tierras turcas. Nos quedaban cosas por ver y, la verdad, no teníamos mucho tiempo. Como diría Jack el Destripador: «vamos por partes». Primero fuimos al Gran Bazar, un laberinto de tiendas. Lo primero que me sorprendió: era cubierto, No sé, siempre me había hecho la idea que fuera al aire libre y en plan marroquí, pero no, eran tiendas normales todas juntas y cubierto, lo que no quita que se tuviera que regatear para comprar cualquier cosa... Después del afán consumista, nos metimos en Santa Sofía y es otro sitio que, la verdad, por fuera promete una cosa y por dentro te da otra, pero merece la pena. Arquitectura bizantina, bonitos frescos y techos y una gran cúpula que en su época fue una revolución en la arquitectura, ya que fue una de las primeras en las que se usaba el ladrillo.

Como quedaba poco tiempo y era obligado, pillamos el barco y nos fuimos a pisar Asia, este viaje que pensábamos que iba a ser un poco muermo, para mí fue uno de los momentos que seguro recordare por mucho tiempo. Nos montamos en el barco, la gente se dispersa y justo debajo de nosotros se colocan dos chavales. El barco comienza su andadura desde Europa a Asia y un grupo de gaviotas, unas 25, empiezan a seguir el barco y los chavales de antes empiezan a lanzarles comida. Entre el planear de las gaviotas y ese fondo, pasando por castillos, mezquitas y el puente, fue un viaje como digo que recordare.
Hicimos el viaje a Asia, dimos una vuelta y para el hostal ¡que perdemos el tren!
Como ya comente, 21 horas la vuelta desde Estambul a Bucarest. Como no, conocimos a las americanas a las que cantamos el "Born in the USA" y a un chaval checo, que nos ofreció chupitos de una bebida de albaricoque casera. Estos compraron Raki (anís turco) y el revisor les enseño como se bebía. La verdad es que hemos tenido suerte con los revisores porque somos un poco "especiales" como pasajeros.

En un rato subo unas fotillos
Bueno chavales, nos vemos en la próxima.

No hay comentarios:

Publicar un comentario